Estrategia - Chile
En una conferencia, en Santiago, alabó la decisión de levantar las restricciones cambiarias, pero advirtió que de no controlar el gasto público se podría terminar como Brasil.
El ex presidente del Banco Central de Argentina Martín Redrado, describió la política del actual mandatario trasandino, Mauricio Macri, como un “shock” en política monetaria, y “gradualista” en lo referente a lo fiscal, pero si bien aprobó medidas como el fin de las restricciones cambiarias y la eliminación de las retenciones a las exportaciones agropecuarias, advirtió que estas deben combinarse con una contención del gasto fiscal para evitar caer en la situación por la que ahora atraviesa Brasil.
En la charla “Argentina: Lecciones Aprendidas y Oportunidades de Inversión”, ofrecida por el banco Scotiabank en Santiago, Redrado comentó que la herencia que Macri recibió del kirchnerismo no es peor que las crisis que vivió el país en 1989, cuando pasó por un período de hiperinflación, o en 2001, cuando entró en el default más grande que se haya registrado.
“Argentina ha tenido crisis recurrentes. Con respecto al `89, no hay una espiral inflacionaria, no hay una carrera desenfrenada entre salarios, devaluación y precios. Y el Banco Central sólo tenía US$80 millones en reservas. Y con respecto 2001 había una relación muy distinta entre el PIB y la deuda”, explicó. Sin embargo, reconoció que varias de las propuestas del mandatario involucran gasto fiscal. “Para mí el tema fiscal es un signo de pregunta hacia adelante. Lo que aquí podría pasar es lo que ahora ocurre en Brasil, donde por mucho tiempo tuvieron una buena política monetaria, pero el gasto fiscal se les fue de las manos. Todas las medidas que se anunciaron fueron para subir el gasto, porque a Macri (originalmente) lo pintaron como el que iba a terminar con los programas sociales. Cómo va a llegar a un déficit de un 0,4% del PIB (actualmente está en el 7%), no lo ha especificado”, dijo.
“Los aciertos de este Gobierno los veo en los financiero, en lo monetario y en la apertura. Macri es un sujeto práctico. Pero por supuesto los desafíos siguen siendo enormes: hace falta un plan integral. Todavía se gasta más de lo que se ahorra. Se necesitan más dólares, no está claro de dónde van a venir y la capacidad para lograr acuerdos está por verse”, resumió.